Opinión
Jueves 28 de Marzo del 2024 19:52 hrs

Pantalla

Acción ligera para las vacaciones


Riesgo Bajo Cero tiene las suficientes escenas de acción para mantenernos entretenidos como espectadores, sobre todo porque ocurren en escenarios muy diferentes a los que estamos acostumbrados a ver tanto en el cine como en México

Riesgo Bajo Cero (The Ice Road/Carretera de hielo) -disponible en Netflix- es una película de acción, entretenida, bien narrada y aunque está plagada de clichés, logra mantener al espectador justamente expectante sobre las aventuras y desventuras de los protagonistas.

Liam Nesson, protagonista de Riesgo Bajo Cero, es un actor que nos ha acostumbrado a sus papeles de personas comunes y corrientes que luchan contra la adversidad para conseguir su objetivo, siempre haciendo gala de su destreza para sobrevivir y vencer a sus oponentes, ya sea por venganza, por ser justiciero o simplemente para sobrevivir. Esta película no es la excepción.

La cinta inicia con una leyenda introductoria que pone la historia en la perspectiva de la acción: “En las regiones más frías de norteamérica, los conductores recorren carreteras sobre ríos, lagos y océanos congelados bajo una capa de hielo de ochenta centímetros, en vehìculos de 29 toneladas. Estos trayectos son peligrosos y a menudo fatales, algunos conductores los describen como misiones suicidas. Popularmente, se les conoce como carreteras de hielo’ (Ice Roads)”.

La historia inicia cuando en una mina subterránea de diamantes ubicada en la provincia de Manitoba, en el centro de Canadá, sucede una explosión debido a la alta concentración de metano, dejando un saldo de ocho mineros muertos y 26 personas sobrevivientes al accidente pero que quedan sepultados bajo tierra. Para rescatarlos es necesario usar equipo especiales para taladrar, provocar una explosión y así liberar el metano para rescatar a los mineros, solo que los equipos necesarios están a muchos kilómetros de distancia, no pueden ser trasladados por aire ya que pesan cerca de 25 toneladas cada uno, y la única posibilidad es llevar los equipos por tierra usando tractocamiones Kenworth y manejar en peligrosas carreteras formadas por una delgada capa de hielo de solo 80 centímetros de espesor. Es abril, ya primavera, y ese tipo de carreteras se mantienen cerradas por seguridad, pero dada la urgencia, autorizan emprender una misión de rescate con tres tractocamiones y tres unidades idénticas para utilizar en los trabajos para rescatar a los mineros sobrevivientes del accidente minero.

Liam Nesson conduce uno de los camiones apoyados por su hermano, veterano de guerra con discapacidad, pero experto y hábil mecánico. Otro es conducido por una mujer y el tercero por el líder de la misión. Ese es solo el planteamiento de la historia, lo entretenido viene cuando inician el arriesgado viaje a temperaturas bajo cero y con alta peligrosidad donde pronto descubrimos quienes son los buenos de la película y se desenmascaran los malos.

Riesgo Bajo Cero tiene las suficientes escenas de acción para mantenernos entretenidos como espectadores, sobre todo porque ocurren en escenarios muy diferentes a los que estamos acostumbrados a ver tanto en el cine como en México. Son solo unos pesados camiones a altas velocidades con cargas de cerca de treinta toneladas conducidos en una desolada autopista de hielo canadiense.

La película me recuerda El salario del miedo, un clásico del cine de 1953, un thriller francés donde cuatro hombres son contratados para conducir dos camiones cargados de nitroglicerina por caminos de un país latinoamericano que ponen en alto riesgo su vida. La cinta original está dirigida por Henri-George Clouzot e interpretada por Yves Montand. En 1977, el norteamericano William Friedkin, director conocido por películas como El Exorcista y La conexión francesa (The French Connection), realizó una nueva versión de la película con el título de Carga maldita (The Sorcerer) que resultó muy inferior a la película original que pretendió homenajear el realizador.

Por la acción y el gozo del espectáculo de los gélidos escenarios en los que fue filmada Riesgo bajo cero, creo que la película es una buena opción para ver en Netflix en estos días de asueto.






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Fuenteovejuna

Prisas y caprichos siempre llevan por mal camino. Primero fue el Tren Maya y ahora se descarrila Mexicana de Aviación con un pleito multimillonario en USA…

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