Podrían alimentos marinos reducir el impacto ambiental
- Por: Raymundo Fernández --
- 30/06/2025 @ 16:29 --
- Mexico
Los también llamados “alimentos azules” tienen menor impacto que los procedentes de la ganadería.
Ciudad de México.- Los alimentos marinos como peces, mariscos, moluscos y crustáceos producen menos emisiones de gases de efecto invernadero, además de tener bajo impacto en tierra y agua en comparación con los procedentes de la ganadería u otros animales de abasto, expuso el director del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM, Píndaro Díaz Jaimes.
Además, representan una alternativa más saludable por sus cualidades alimentarias como contenido de aminoácidos esenciales, proteínas de calidad y ácido graso Omega 3.
“Al ser cultivados contribuyen a evitar el impacto de la sobrepesca en especies cuyas poblaciones se encuentran en algún grado de sobreexplotación”, agregó durante la inauguración del foro “Horizontes azules. Ciencia encaminada hacia la agenda alimentaria”.
Díaz Jaimes destacó que el objetivo del Foro es fomentar un diálogo productivo, facilitando el intercambio de ideas y la retroalimentación sobre los desafíos y las oportunidades que rodean a los también llamados “alimentos azules” ante el cambio climático.
Durante el encuentro académico -organizado por esa entidad académica y Environmental Defense Fund de México (EDF)-, el director general del Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables, organismo descentralizado de la Secretaría de Agricultura, Víctor Manuel Vidal Martínez, explicó:
“La acuacultura va a ser uno de los motores más importantes de producción de proteína animal en las décadas por venir”. En México se obtiene 83 por ciento de los animales marinos para consumo humano mediante la captura directa, mientras que 17 por ciento por acuacultura, que es la cría y producción de especies en ambientes controlados de agua dulce o salada.
El país cuenta con mil 725 embarcaciones mayores registradas y 76 mil 876 menores, lo que significa que la pesca artesanal es fundamental, enfatizó.
Vidal Martínez manifestó que la producción pesquera nacional está sesgada hacia las dos penínsulas: de Baja California y de Yucatán. Sin embargo, en los estados de Colima, Guerrero, Oaxaca y Chiapas prácticamente no existe.
Juan Manuel Calderón Alvarado, director de Políticas Públicas en EDF de México, subrayó que nuestra nación cuenta con más de 11 mil kilómetros de litoral y dos océanos alrededor de su territorio, pero aproximadamente 65 por ciento de los productos del mar (pescados, pulpo, camarón y langosta) se exportan, especialmente a Estados Unidos. En contraste, alrededor de 40 por ciento de la población nacional presenta algún tipo de inseguridad alimentaria.
Con los recursos marinos que tenemos, se tiene una oportunidad porque pueden ser fuente de solución a esa problemática y al bienestar social en las zonas costeras, resaltó.
Verónica Lango Reynoso, directora general de Organización y Fomento de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, mencionó la importancia del encuentro académico para trabajar de manera conjunta ciencia, políticas públicas y sociedad, a fin de enfrentar retos como cambio climático, sobreexplotación de los recursos y garantizar alimentos nutritivos para la población.
Margarita Caso Chávez, directora general de Conservación y Gestión de Mares y Costas de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, reconoció:
“Tenemos la decisión de dar un gran impulso a los océanos y las costas, a las que queremos constituir como eje de desarrollo y abordar desafíos como contaminación, degradación de ecosistemas y sobreexplotación de recursos”.
Debemos relacionar a las comunidades locales de pescadores y de habitantes costeños para construir una ley de costas, así como avanzar en la campaña nacional de limpieza de las playas, añadió.
Mauricio Márquez Corona, vicepresidente de la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, dijo que durante décadas los océanos han sido vistos a partir de diversas perspectivas, pero no desde la estadística, necesaria para tener una contabilidad ambiental y de los sistemas de información para saber cómo podemos hacer visibles las contribuciones de los ecosistemas marinos al bienestar de la población y al equilibrio ecológico.
“Valorar los servicios ambientales, económicos y sociales que proveen al planeta son evidencia para la acción climática, para el diseño de políticas alimentarias y para fortalecer la gobernanza de los recursos marinos”, comentó.
En un mansaje a distancia, Jon Erlingur Jonasson, de la Coalición Internacional de Alimentos Azules, externó: nos encontramos en un año importante para la acción en la intersección de la salud oceánica, el sistema alimentario y el clima, pues se llevaron a cabo la Conferencia de Océanos de la Organización de las Naciones Unidas y la Conferencia de las Partes 30.
“Un océano saludable juega un papel crítico al abordar los efectos dañinos del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la polución. Sin ecosistemas saludables, costeros y marinos, el uso sostenible y responsable de los recursos marinos no puede ser asegurado”, finalizó.