Así, el tener una gran idea, el hacer un gran anuncio en una gran inauguración, no es lo mismo que ser un gran innovador. Esperemos ansiosos, y sin perder la esperanza, el gran anuncio que nos darán Claudia y Altagracia de México, país de innovación.
El mes de octubre, fue excepcionalmente trágico para la Presidenta, su movimiento, los ciudadanos y la nación.
La oferta hecha, el precio de garantía, es un cálculo financiero que hizo alguien ajeno a la realidad de estos mexicanos, con una visión limitada, a partir de reportes, análisis y directrices financieras que poco explican el drama que se vive en el campo.
La oposición, enfrenta el problema de que no reconoce que la cancha donde pueden jugar es otra. El relanzamiento del PAN, el nuevo, pugilato y contestón PRIAlito y el tímido MC, del que no se escucha ni interesa, parecen estar más interesados en aferrarse a lo que queda, que en reconocer las nuevas condiciones y hacer frente a Morena.
Regresamos a la cantaleta de siempre, mientras sentemos nuestras perspectivas en el dinero y la tecnología de otros (inversión extranjera), que nos llega por meras condiciones geográficas (la vecindad con EE. UU.) a pesar de que hacemos todo lo posible para evitarlo (reformas judiciales y del amparo, falta de inversión, mala educación, capitalismo de cuates, etc., etc.) seguiremos no perdiendo la oportunidad de perder una oportunidad.